Xóchitl Gallardo fue a Chicago hace 20 años por motivos de trabajo. Ya conocía a Carlos Anderson, su actual marido y socio, cuando, en esta mudanza a Chicago, probó por primera vez las palomitas favoritas de los americanos: palomitas de caramelo combinadas con queso cheddar.
Ella, mexicana de nacimiento, alucinó con este sabor tan llamativo aunque muy popular en EEUU, y el olor que procedía de la tienda de palomitas cerca de su oficina la rodeaba todos los días de camino al trabajo.
Ella, mexicana de nacimiento, alucinó con este sabor tan llamativo aunque muy popular en EEUU, y el olor que procedía de la tienda de palomitas cerca de su oficina la rodeaba todos los días de camino al trabajo.
Fue en 2008 cuando regresó a Mexico y junto a Carlos se aventuraron a abrir una tienda de palomitas, pero nada habitual: Uva, mora, sal y caramelo, mango con chile o manzana con canela son sólo algunos de los sabores que se pueden encontrar en Palomanía, la atípica tienda de palomitas gourmet.
Trabajaron duro. Nadie confiaba en su idea de negocio ("¿Pero quién diablos va a querer comer unas palomitas con sabor a queso blanco y jalapeño?", pensarían algunos desconfiados). Pero ellos creían en su negocio y en su sueño. En 2009 registraron el nombre de Palomanía, y su expansión se dio casi al momento, recibiendo pedidos de grandes y pequeños clientes. Y es a ellos a los que escucha cuando busca nuevos sabores que añadir a los 30 actuales, con muchas personas pidiendo a través de la web nuevos sabores tradicionales de México, como chiplote o chapulines.
A finales de 2012, decidieron convertirse en franquicia, iniciando su expansión a principios de 2013, teniendo en la actualidad cuatro locales más además del inicial. ¿Llegarán algún día a España? Simplemente al pensar en unas palomitas de mandarina... se nos hace la boca agua.
Trabajaron duro. Nadie confiaba en su idea de negocio ("¿Pero quién diablos va a querer comer unas palomitas con sabor a queso blanco y jalapeño?", pensarían algunos desconfiados). Pero ellos creían en su negocio y en su sueño. En 2009 registraron el nombre de Palomanía, y su expansión se dio casi al momento, recibiendo pedidos de grandes y pequeños clientes. Y es a ellos a los que escucha cuando busca nuevos sabores que añadir a los 30 actuales, con muchas personas pidiendo a través de la web nuevos sabores tradicionales de México, como chiplote o chapulines.
A finales de 2012, decidieron convertirse en franquicia, iniciando su expansión a principios de 2013, teniendo en la actualidad cuatro locales más además del inicial. ¿Llegarán algún día a España? Simplemente al pensar en unas palomitas de mandarina... se nos hace la boca agua.
Deborah Picher - @debybowie